Qué es un cheque cuáles son sus tipos y características

El cheque se trata de un método de pago por el que una persona entrega un documento a otra con el importe correspondiente para que ésta lo cobre en el banco. De manera simple y muy resumida, el cheque equivale al abono por tarjeta de crédito, pero sin tecnología de por medio.

Si bien su popularidad ha decaído en la actualidad, por el motivo que hemos empleado como ejemplo en el párrafo anterior, sigue estando vigente a la hora de realizar determinadas transacciones. 

Tipos de cheque y características

En total, tenemos cinco tipos de cheque que podemos utilizar. Eso sí, conviene matizar, que su validez como método de pago no implica que sea aceptado por todo el mundo. Un restaurante no permitirá que abonemos la cuenta con este sistema, por ejemplo. Pero, en otras circunstancias, veremos que está aceptado.

 

Cheque al portador

Sin duda alguna, el más conocido para todos nosotros. El talonario (libreta de cheques) actúa como una billetera en este caso. Lo único que hay que hacer es escribir el importe que una persona va a recibir en el banco y firmarlo

 

Los datos del beneficiario aparecen definidos por la denominación de al portador. Esto quiere decir que la persona que entregue el cheque recibirá el dinero. El beneficiario, no obstante, puede endosar el cheque a otra persona para que lo cobre. Es decir, entregárselo. 

 

El endoso, a pesar de su comodidad, tiene un grave problema. Al tratarse de un cheque al portador, el banco no comprobará la identidad de quien recibe el importe firmado. Por tanto, en caso de robo o extravío del cheque, cualquier persona puede acudir a la entidad de pago correspondiente y apropiarse del dinero sin preguntas.

 

Cheque nominativo

El problema de los cheques al portador se soluciona fácilmente con los cheques nominativos. Aquí, además del importe a pagar y la firma del titular de la cuenta, deben aparecer los datos identificativos del beneficiario

 

Esto implica que solamente la persona cuyos datos figuran en el cheque puede reclamar el dinero en el banco. Esta persona puede ser tanto física como jurídica. En el primer caso, presentará su DNI en la sucursal bancaria para poder cobrarlo. En el segundo, mostrará la autorización legal pertinente antes de poder recibir el dinero.

 

El sistema de endoso que hemos visto en los cheques al portador está también autorizado en los cheques nominativos. Para ello, el cheque nominativo debe estar cursado a la orden. En caso contrario, solamente la persona cuyos datos figuren en la parte del beneficiario podrá recibir el dinero.

Qué es un cheque cuáles son sus tipos y características

Cheque cruzado

Por supuesto, a pesar de la seguridad que aportan los cheques nominativos, el riesgo de que el dinero acabe en manos ajenas no ha desaparecido. Un robo de cartera con el cheque nominativo y DNI son suficientes para cumplir los requisitos del banco, por ejemplo.

 

Para evitar la apropiación indebida, tenemos los cheques cruzados. Reciben este nombre porque la persona que extiende el cheque añade dos rayas verticales en paralelo sobre el cheque. Esto indica que el dinero solo se puede ingresar en la cuenta del beneficiario.

 

Cheque conformado

Si bien se trata de otro tipo de cheque, su función no es tanto la de método de pago como la de ofrecer garantías del mismo para una tercera persona en el banco. Dicho de otra manera, el banco no cobra el cheque conformado a menos que el pago acordado por la tercera persona no se realice.

 

Este tipo de cheques sirven para avalar la solvencia económica de otra persona y garantizar el cumplimiento de la deuda adquirida por la misma. 

 

Cheque bancario

Esta vez, el cheque lo firma un banco, lo cual supone una garantía de pago mucho más alta. Porque quien debe pagar es el mismo banco. Pero, si de seguridad se trata, el cheque también puede estar emitido por el Banco de España.

 

Cheques de viajero 

Tal vez los más desconocidos, se trata de una serie de cheques emitidos por una entidad bancaria o entidad financiera que sirven para pagar o canjear por efectivo en cualquier lugar del mundo.

 

Los cheques en la actualidad

El uso de los cheques como método de pago ha decaído en los últimos años. En algunos países, de hecho, han desaparecido: Bulgaria, Chequia, Croacia,  Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Finlandia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Hungría, Países Bajos, Polonia y Suecia. El resto del mundo los sigue empleando, pero cada vez menos y más dentro del entorno de persona jurídica que física.

 

Entre los motivos de su ocaso tenemos, entre otros, la incomodidad que suponen con respecto a los métodos electrónicos, que no requieren de presencia física en la entidad bancaria para cobrarlos. Por otro lado, las transferencias bancarias permiten enviar dinero a cualquier parte del mundo en segundos y de manera inmediata, a diferencia de los cheques que, como ya hemos visto, requieren desplazamiento y personificación real. 

 

Sin embargo, mucho más importante resulta el tema de la garantía de cobro. Una persona puede llegar al banco y descubrir que la cuenta que debe satisfacer la deuda se encuentra sin fondos.