¿ Qué es un balance de sumas y saldos?

El balance de sumas y saldos es una herramienta contable que emplean las empresas para registrar los movimientos de sus cuentas y comprobar que no se hayan cometido errores que afecten al Libro mayor. Aquí aparecerán las entradas y salidas de dinero en la fecha correspondiente, categorizadas en el número de cuenta específico, reflejando el flujo de caja y el saldo actual de la empresa. También se conoce como balance de comprobación.

Las empresas, por ley, están obligadas a realizarlo, puesto que es uno de los elementos que conforman el Libro de inventarios y cuentas anuales. Su periodicidad es variable aunque se debe transcribir, al menos, de manera trimestral.

 Elementos de un balance de sumas y saldos

 Los campos que se tienen que incluir en este balance  son los siguientes:

Número de cuenta del libro mayor de un balance de susmas y saldos

Se trata de un número que identifica el asiento contable realizado. Hay 7 grupos  de números en total, en los que se detalla la naturaleza del movimiento. De esta manera, los números del grupo 1 reflejan la financiación básica, los del 2 el inmovilizado, los del 3 las existencias, los del 4 los acreedores y deudores por operaciones de tráfico, los del 5 las cuentas financieras, los del 6 las compras y gastos y los del  7 las ventas e ingresos.

 Nombre de la cuenta

Aquí aparecerá el nombre correspondiente a cada uno de los números de los 7 grupos del punto anterior. Por ejemplo, el 600 es la compra de mercaderías y el 472 el IVA Soportado.  Cada uno refleja una acción particular a través de un elemento concreto. Por ejemplo, si realizamos el pago al contado, se contabiliza bajo el 570: Caja, euros. Pero si se efectúa a través del banco, pondremos 572: Bancos en instituciones bancarias. El apunte contable siempre debe reflejar el nombre oficial del mismo.

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Sumas (divididas entre Debe y Haber)

Los importes económicos correspondientes a cada número se anotan en este punto. Este apartado se divide en dos partes: el Debe y el Haber. El debe refleja los ingresos y débitos y el haber los gastos o créditos de la empresa. Es decir, que un ingreso en el Debe supone un gasto en el Haber. Por esa razón, cada cuenta que se anote en uno de estos lados tiene su equivalente en la otra, bien mediante una cuenta o varias.

 

Ejemplo: La empresa recibe una factura de 100€ con IVA y la paga al contado.

 

Debe

Haber

100 (600) Compra de mercaderías

21 (472) H.P. IVA Soportado

(400) Proveedores  121

121 (400) Proveedores

(570) Caja, euros  121

 

 Pero si la empresa vende mercancías por valor de 100€ más IVA y la cobra en efectivo, el asiento se realizará de la siguiente manera:

 

 Debe

Haber

121 (430) Clientes

(700) Venta de mercaderías  100

(477) H.P. IVA Repercutido 21

121 (570) Caja, euros

(430) Clientes  121

 

Por ultimo, los apuntes deben seguir el principio de la contabilidad de Partida Doble, que significa que los saldos de ambas columnas deben coincidir.

Saldos (divididos entre Deudor y Acreedor)

El saldo es la diferencia entre el Debe y el Haber. En los ejemplos anteriores hemos anotado un movimiento concreto, sin incluir el resto de la contabilidad de la empresa, por lo que el Debe y el Haber se anulan mutuamente. Pero como podéis comprobar, la contabilidad de la empresa incluye más elementos. De nuevo, empleamos el principio de la Partida Doble, por lo que los saldos de ambas columnas (Deudor/Acreedor) deben coincidir.